España:

 José María Aznar, entre ladrones y financiadores de terroristas

 

 

Por: Juan Torres

Ganas de escribir

 

La reciente sentencia sobre el caso SINTEL pone de actualidad las relaciones de Aznar con personajes como el fallecido Mas Canosa y sus hijos, ahora reconocidos como ladrones y de hace tiempo vinculados a terroristas. Conviene recordarlo.

 

La Audiencia Nacional española acaba de sentenciar sobre el llamado caso SINTEL, una empresa filial de Telefónica que fue vendida a bajo precio a Jorge Mas Canosa, el empresario de origen cubano asentado hasta su muerte en Estados Unidos.

Después de una gestión desastrosa la historia terminó con casi dos mil trabajadores despedidos, grandes pérdidas para el Estado y altos beneficios para los empresarios.

Ahora, el juez ha dictaminado que los hijos del fallecido Jorge Mas y otros directivos, "guiados por el ánimo de obtener un beneficio económico a costa del patrimonio de Sintel (Sistemas e Instalaciones de Telecomunicación SA) (...) coadyuvaron conscientemente al desmantelamiento patrimonial de lo que era Sintel con el desgajamiento de sus sociedades filiales, todo ello con incumplimiento de las obligaciones tributarias de llevanza de la contabilidad mercantil o libros o registros fiscales". Vamos, que robaron.

La sentencia ha pasado casi desapercibida en la prensa y, sobre todo, que Jorge Mas Canosa no solo fue un ladrón sino un patrocinador de terroristas y financiador y amigo del ex presidente español José María Aznar.

Hace poco, el hijo de Mas declaraba a la cadena SER que “Aznar nos ha dicho que podemos contar con su apoyo al igual que el de la fundación FAES que él preside”, confirmando así que seguían las buenas relaciones entre Aznar y su familia.

El periodista Pascual Serrano mostraba hace ya siete años (aquí) las vinculaciones entre la familia Mas, el exilio cubano y las actividades criminales y terroristas que a su amparo se llevan a cabo, hasta el punto de que se barajaba que su organización, la Fundación Nacional Cubano-Americana (FNCA), con la que colabora Aznar, fuese declarada una “organización criminal”. Y otros medios han puesto de relieve sus vinculaciones personales, políticas y financieras (basta hacer una búsqueda rápida en Google o, por ejemplo, pinchar aquí).

http://www.juantorreslopez.com

Aznar debería responder por el fraude de Sintel…

x Jean-Guy Allard - La Haine

En abril de 1996, apenas un mes después de la llegada a la presidencia del gobierno de José María Aznar, la empresa estatal española Telefónica procedió a venderle a la firma MASTEC Incorporated, propiedad del empresario y agente de la CIA Jorge Mas Canosa, la entonces próspera empresa SINTEL.

La transacción levantó serias acusaciones contra Aznar de haber regalado SINTEL, que contaba con una plantilla de más de 1 800 trabajadores, a MASTEC, en agradecimiento por el apoyo abierto y público que Mas Canosa había brindado al candidato del Partido Popular (PP), quien en noviembre de 1995 viajó a Centroamérica desde Miami en el avión particular del entonces "chairman" de la FNCA.

José Antonio "Toñín'' Llamas, miembro del Comité Ejecutivo de la FNCA y de su comité paramilitar —quien estuvo estrechamente vinculado a las bombas que explotaron en 1997 en hoteles de La Habana administrados por empresas españolas y participó en la organización de ese viaje de José María Aznar a Miami— ha señalado cómo Jorge Mas Canosa destinó decenas de miles de dólares tanto al financiamiento de los atentados terroristas como a la campaña presidencial del jefe del PP.

Los afectados de SINTEL manifestaron la semana pasada que, después de ocho años de sufrimiento y espera, juzgan "decepcionante" y "fruto de presiones" la decisión del juez Pedraz que, en un segundo fallo, deja fuera de la acusación a altos cargos de Telefónica y no menciona para nada a José María Aznar.

AZNAR SE LIBRA

Jorge Mas Santos, actual "chairman" de la Fundación Nacional Cubano-Americana (FNCA), y su hermano Juan Carlos, hijos de Jorge Mas Canosa (después fallecido), son quienes tendrán que responder a la justicia española en lugar de Aznar, luego de que la Audiencia Nacional los acusara por un fraude de 59,4 millones de euros, relacionado con la quiebra de la empresa SINTEL.

El magistrado madrileño Santiago Pedraz, titular del Juzgado Central de Instrucción número 1, alega que los hijos del empresario y fundador de la FNCA Jorge Mas Canosa, Jorge y Juan Carlos Mas Santos, "máximos responsables" de la firma miamense MASTEC, "distrajeron importantes cantidades de dinero" procedente de la firma española SINTEL, "en favor de la familia Mas".

Jorge Más Santos es el actual Jefe de la FNCA, grupo miamense patrocinador de numerosos actos de terrorismo contra Cuba.

En su fallo, el juez instructor señala cómo la familia Mas ha traspasado las acciones de SINTEL a varias sociedades instrumentales en "paraísos fiscales", que después sirvieron para el "vaciamiento patrimonial" de la antigua filial de la operadora Telefónica para lo cual utilizaron una trama de sociedades que pasaba por México, Puerto Rico y EE. UU.

Asimismo, "realizaron actos para la progresiva descapitalización" de la antigua filial, a través del giro de una serie de avales y préstamos que, de una u otra forma, tenían como beneficiarios a MASTEC o firmas de su entorno.

Ya en diciembre de 1998, en un contrato de reconocimiento de deuda por parte de Telefónica y MASTEC, se utilizaba a la propia SINTEL como aval para pagar su compra. La mayor parte de las acciones de SINTEL fueron transferidas a cinco sociedades, cuatro de ellas domiciliadas en las Islas Vírgenes, cuyos administradores están ahora entre los acusados.

Como parte de este comportamiento empresarial mafioso, las filiales de Sintel en cuatro países sudamericanos pasaron también a esas sociedades fantasmas, al mismo tiempo que se descapitalizaba a la firma con la venta de otras diez empresas del conglomerado.

SE ROBARON HASTA EL FONDO DE RETIRO

Un artículo conmovedor publicado en ese año 2001 por la revista española Interviú daba quizás la amplitud del desastre humano del cierre de SINTEL y el elemento común a ambos acontecimientos: el desprecio de la vida humana por parte de Jorge Mas Canosa y de los que los secundaron.

Según la revista, "catorce trabajadores muertos, siete por suicidio, siete por infarto; otro más rehabilitándose tras estar dos meses en coma y 70 empleados en tratamiento psiquiátrico", eran las consecuencias directas, hasta ese momento, de la venta fraudulenta de SINTEL; sin contar que "el 80% de las esposas e hijos de los trabajadores sufren depresión o estrés".

Según dijo entonces Adolfo Jiménez, uno de los trabajadores estafados, los empresarios miamenses, en su afán de apropiarse de aún más dinero, se habían robado "diez nóminas, dos extras, las cuotas de los seguros de vida y los planes de pensiones" de los trabajadores.

Miami: El jefe de la FNCA, ante los tribunales por un fraude de 59 millones de euros

 

En su afán de apropiarse de aún más dinero, los Mas Santos robaron hasta los fondos de jubilación de los 1 800 trabajadores

 

Por: Jean Guy-Allard

laRepublica.es

Jorge Mas Santos, actual "chairman" de la Fundación Nacional Cubano Americana (FNCA) y su hermano Juan Carlos, hijos del empresario y agente de la CIA Jorge Mas Canosa, tendrán que responder a la justicia española, luego de que la Audiencia Nacional los acusara por un fraude que alcanza 59,4 relacionado con la quiebra de la empresa SINTEL.

El magistrado madrileño, Santiago Pedraz, titular del Juzgado Central de Instrucción número 1, reconoce que los hijos del empresario y fundador de la FNCA Jorge Mas Canosa (ya fallecido), Jorge y Juan Carlos Mas Santos, "máximos responsables" de la firma miamense MasTec, "distrajeron importantes cantidades de dinero" procedente de la firma española Sintel "en favor de la familia Mas".

Jorge Más Santos es el actual Jefe de la FNCA, grupo miamense patrocinador de numerosos actos de terrorismo contra Cuba que pretende enseñar a la Isla las virtudes del capitalismo.

En su fallo, el juez instructor señala como los acusados han traspasado las acciones de Sintel a varias sociedades instrumentales en ’paraísos fiscales’, que después sirvieron para el "vaciamiento patrimonial" de la antigua filial de la operadora Telefónica para lo cual utilizaron una trama de sociedades que pasaba por México, Puerto Rico y EE. UU.

Asimismo, "realizaron actos para la progresiva descapitalización" de la antigua filial, a través del giro de una serie de avales y préstamos que, de una u otra forma, tenían como beneficiarios a MasTec o firmas de su entorno.

Ya en diciembre de 1998, en un contrato de reconocimiento de deuda por parte de Telefónica y MasTec, se utilizaba a la propia Sintel como aval para pagar su compra. La mayor parte de las acciones de Sintel fueron transferidas a cinco sociedades, cuatro de ellas domiciliadas en las Islas Vírgenes, cuyos administradores están ahora entre los acusados.

Como parte de este comportamiento empresarial mafioso, las filiales de Sintel en cuatro países sudamericanos pasaron también a esas sociedades fantasmas, al mismo tiempo que se descapitalizaba a la firma con la venta de otras diez empresas del conglomerado.

CUANDO Y CÓMO COMENZÓ TODO

En abril de 1996, apenas un mes después de la llegada a la presidencia del gobierno de José María Aznar, la empresa estatal española Telefónica, procedió a venderle a la firma MasTec Incorporated, de Jorge Mas Canosa, a través de su filial MasTec Internacional, la entonces próspera empresa Sintel, que contaba con una plantilla de más de 1 800 trabajadores.

La transacción, en su momento, levantó muchas suspicacias por el apoyo abierto y público que Mas Canosa había brindado al candidato del Partido Popular (PP), quien en noviembre de 1995 viajó a Centroamérica desde Miami en el avión particular del entonces "chairman" de la FNCA.

José Antonio "Toñín’’ Llamas, miembro del Comité Ejecutivo de la Fundación Nacional Cubano-americana (FNCA) y de su comité paramilitar, quien estuvo estrechamente vinculado a las bombas que explotaron en 1997 en hoteles de La Habana administrados por empresas españolas y participó en la organización de ese viaje de José María Aznar a Miami, ha señalado como Jorge Mas Canosa destinó decenas de miles de dólares tanto al financiamiento de los atentados terroristas como a la campaña presidencial del jefe del PP.

Los afectados de Sintel manifestaron esta semana como, después de ocho años de sufrimiento y espera, juzgan "decepcionante" y "fruto de presiones" la decisión del juez Pedraz que, en un segundo fallo, deja fuera de la acusación a altos cargos de Telefónica y no menciona para nada a José María Aznar.

SE ROBARON HASTA EL FONDO DE RETIRO

En 1997, la Guardia costera norteamericana detenía en las aguas jurisdiccionales de Puerto Rico al yate "La Esperanza", propiedad de Antonio "Toñin" Llamas, el introductor de Aznar en Miami, cuando sus seis tripulantes se dirigían a la Isla Margarita con la intención de asesinar al Presidente cubano, Fidel Castro, quien participaría en la Cumbre Iberoamericana en ese balneario venezolano.

Quiso la casualidad que el nombre de La Esperanza estuviese ligado, tres años después, a otro propósito totalmente contrapuesto.

"La Esperanza" fue también el nombre que escogieron los trabajadores de Sintel, que fueron despedidos por los Mas Santos, para el campamento de protesta que establecieron, en pleno centro de Madrid, en enero del 2001.

Un articulo conmovedor publicado en ese año por la revista española Interviú daba, quizás,la amplitud del desastre humano del cierre de Sintel y el elemento común a ambos acontecimientos: el desprecio de la vida humana por parte de Jorge Mas Canosa, de sus hijos y de los que los secundaron.

Según la revista, "catorce trabajadores muertos, siete por suicidio, siete por infarto; otro más rehabilitándose tras estar dos meses en coma y 70 empleados en tratamiento psiquiátrico" eran las consecuencias directas, hasta ese momento, de la venta fraudulenta de Sintel, a Jorge Mas Canosa y su familia; sin contar que "el 80 por ciento de las esposas e hijos de los trabajadores sufren depresión o estrés".

Según dijo entonces Adolfo Jiménez, uno de los trabajadores estafados,

Los empresarios miamenses, en su afán de apropiarse de aún más dinero, se habían robado "diez nóminas, dos extras, las cuotas de los seguros de vida y los planes de pensiones" de los trabajadores…


 

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