2006 – 8 de Enero - 2017
EL PCT CUMPLE 11 AÑOS
¿Cómo se miden 11 años de un grupo de seres humanos que tratan de organizarse para cambiar el mundo? ¿cómo, si ese mundo y el país están lejos del objetivo que se han propuesto e incluso ha retrocedido en la consciencia de las masas?
Se mide con la pasión. Con la voluntad inclaudicable que se sobrepone a todos los obstáculos, por más funestos que estos sean.
Se mide en la memoria y la dignidad de nuestros ausentes.
Se mide con la lucha, con las propuestas, con los lazos tendidos, con la prédica unitaria, con la irrenunciable identificación con el marxismo y el leninismo como herramientas para liberar a nuestra clase de todas las cadenas que la sojuzgan.
Se mide con la tozudez de saberse inmersos en una lucha titánica y desigual contra un enemigo brutal, pero con la perspectiva de construir contrahegemonía para derrotarlo en un futuro lo más cercano posible.
Se mide con la humildad de reconocer las limitaciones y los errores propios y del espacio ideológico que integramos.
Quienes somos parte del PCT sabemos que nos asiste la razón y estamos orgullosos por haber elegido el camino de la revolución para intentar terminar con la sociedad capitalista -fuente de todos los males de la inmensa mayoría de la Humanidad-, para construir otra en la que no existan la explotación del hombre por el hombre, la desigualdad, la injusticia ni la pobreza. Es decir, para construir el socialismo como camino a la sociedad sin clases, el comunismo.
Pero también sabemos que hay diferentes visiones para lograr esos objetivos, y respecto a ellos sabemos que no somos los dueños de la verdad. Estamos convencidos de que es necesario un gran debate de todo el espectro revolucionario sobre tan crucial aspecto de la lucha, que exige a su vez desandar décadas de caminos de desencuentros entre los revolucionarios. Exige tolerancia para dejar atrás la autoproclamación, el sectarismo y la división permanentes, tan funcionales al poder burgués.
Si la burguesía ha sabido a través de los siglos constituir su Estado que hoy está globalizado y domina el mundo, es nuestra obligación germinar un Estado proletario, aún sin territorio pero sí constituido en un “estado mayor”, donde las coincidencias se transformen en política unitaria y se lleven a cabo en conjunto, tanto para defender los derechos de la clase trabajadora como para luchar por el poder. Eso, respetando la independencia de cada organización, de cada corriente, de cada destacamento, hasta que hayan madurado las condiciones para conformar una herramienta única.
Es la única forma de darle coherencia a nuestra lucha y objetivos.
En el PCT, como lo hicimos en cada uno de nuestros 11 años de vida, seguiremos intentado esa unidad imprescindible para empezar a disputar con seriedad el poder que hoy sostiene de manera aplastante la burguesía imperialista.
PROLETARIOS DEL MUNDO UNÍOS
SOCIALISMO O BARBARIE
Partido Comunista de los Trabajadores
