POR QUÉ EL ENCUENTRO SOCIALISTA ANTIIMPERIALISTA

 

 

En algún momento hay que decir basta. Darse cuenta. Entender que algo no anda bien, que no resulta. Que los caminos elegidos nos llevan a ninguna parte. La izquierda en nuestro país –y podría decirse en casi todo el mundo- lleva décadas de yerros y confusión. Estamos convencidos de que nuestra ideología es la correcta. Pues bien, de eso no hay dudas. Pero si después de años de intentos de construcción revolucionaria estamos cada vez más lejos de las aspiraciones de las masas y no sólo eso, sino que adoptamos formas, hábitos, términos y hasta conceptos del enemigo de clase, es que algo estamos haciendo terriblemente mal.

 

La burguesía vive un momento histórico de triunfo, porque las masas desposeídas, explotadas y marginadas han dejado de luchar por el Poder, para sólo contentarse con simples mejoras dentro del sistema que las desposee, explota y margina. Eso es la resultante de las derrotas de lo que se llamó bloque socialista a nivel mundial y de las organizaciones armadas en los 70-80 a nivel local, y del consecuente surgimiento de direcciones domesticadas al poder y la institucionalidad burguesas.

 

Las organizaciones de izquierda autodenominadas revolucionarias se amoldaron a los límites impuestos por la burguesía. Concentraron su lucha en lo reivindicativo y en lo electoral. Y se sumieron en debates que terminaron por dividir todo el espectro, convirtiéndose en fragmentos que nada podían cambiar por sí solos. Una división que se hizo estructuralmente funcional a los intereses que decimos combatir.

 

Quienes conformamos el Encuentro Socialista Antiimperialista, conscientes de todo lo antedicho, pergeñamos este nuevo espacio para intentar cambiar esa realidad y apuntar a construir verdadero poder revolucionario, uno que de la batalla de ideas a las clases dominantes en todos los órdenes, que no se domestique al sentido común impuesto, que cuestione lo “políticamente correcto”, que repudie su institucionalidad y sus leyes, que denuncie claramente al sistema capitalista y que no tenga empacho en proclamar la necesidad de destruirlo y no reformarlo. Uno que no ponga a las urnas por encima de las luchas necesarias. Uno que se constituya en la pesadilla de los dueños de este mundo injusto, salvaje y desigual.

 

En principio, somos la Tendencia Guevarista, el MTR Histórico, el MTR 12 de Abril, Resistencia Para la Liberación y el PCT, basados en 10 puntos programáticos y de principios *, sin creernos los dueños de la verdad, abiertos a enriquecer este nuevo espacio con la incorporación de todas las organizaciones dispuestas a superar la triste historia de división, autoproclamación, lucha reivindicativa y electoralista.

 

Construir la dirección política que sea capaz de guiar y acompañar a las masas hacia el horizonte socialista es obligación de todo militante revolucionario. Desde el ESA tendemos las manos para dar vuelta la página de la historia de decadencia y empezar a escribir la que libere definitivamente a nuestra clase y nuestro pueblo de todas sus cadenas.

 

Gustavo Robles

Septiembre 2019

 

(Nota escrita para Hasta la Victoria Siempre, órgano de prensa de la Tendencia Guevarista)